La fibrilación atrial o auricular se caracteriza porque el ritmo del corazón está ‘irregularmente irregular’ con latidos desorganizados y usualmente rápidos. Esta arritmia se tiende a presentar en pacientes mayores a los 65 años, con hipertensión y con diabetes, lo que los hace más propensos a tener insuficiencia cardíaca, derrames e infartos cerebrales, una de las consecuencias principales de esta condición.
El doctor Edmundo Jordán, cardiólogo y presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología, en entrevista con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP) conversó sobre esta arritmia y comentó que “la fibrilación atrial afecta al 3% de la población mundial y podría ser la causa de un 30% de los derrames cerebrales isquémicos. De hecho, en Estados Unidos 2.2 millones de individuos sufre de fibrilación atrial”.
“En Puerto Rico no tenemos números precisos de prevalencia e incidencia, lo que sí sabemos es que la fibrilación atrial es la arritmia más común con alta morbilidad que puede causar un infarto cerebral. También que está altamente asociada a pacientes que tienen presión alta y diabetes. En tercer lugar está asociada a pacientes que tienen problemas valvulares del corazón (cardiomiopatía) y/o fallo cardíaco”,
dijo el Dr. Jordán a MSP.
Cuando las personas presentan palpitaciones, falta de aire, mareos o dolor en el pecho deben acudir al médico. Sin embargo, a veces no presentan esas señales sino que sienten que el pulso se pone irregular con pausas y/o latidos acelerados.
El llamado que hace el cardiólogo es acudir inmediatamente al profesional de salud y realizarse un electrocardiograma. Esta es la forma más confiable de saber si tiene fibrilación atrial. A partir de ahí “se trata a esta condición con medicamentos para controlar la frecuencia y el ritmo cardíaco como los betabloqueadores y los bloqueadores de canales de calcio, más el uso de anticoagulantes para prevenir un evento cardioembólico”.
Hay otros factores que están asociados como pacientes que tienen enfermedad pulmonar, que son obesos, tienen apnea del sueño o que fuman. También podrían estar a riesgo de fibrilación atrial los que tienen problemas de tiroides.
Usualmente, explica el doctor, se dice que ser mujer ya produce un factor más de riesgo. Sin embargo, en el promedio de la población, los pacientes a mayor edad, más riesgo tienen.
Recalcó que las personas con hipertensión, diabetes, insuficiencia cardíaca, enfermedad valvular del corazón y factores asociados como problemas congénitos del corazón están más propensas a desarrollar fibrilación atrial.
“La fibrilación atrial es la arritmia más común seria en el paciente cardíaco y el primer factor de riesgo es tener alta presión”,
dijo el Dr. Jordán a MSP.
El doctor sostiene que un médico con experiencia puede decir si un paciente está fibrilando o no clínicamente al examen físico. Sin embargo, para realizar intervenciones un electrocardiograma es esencial y fundamental.
“Ahora mismo hay unos dispositivos como el Apple Watch que tienen una aplicación que puede determinar si el paciente está con fibrilación atrial. Es un electrocardiograma de una sola derivación que clasifica el ritmo y la rapidez del mismo ya sea normal (sinusal) y/o fibrilación auricular o no concluyente. También avisa si la frecuencia cardíaca es alta o baja. La intención de estos aparatos es el diagnóstico precoz de cierta arritmia fuera del ámbito clínico pero lo más importante es buscar atención médica”,
aseguró el Dr. Jordán a MSP.
Comentarios de Facebook