Por: Angélica Claudio Merced
Las válvulas cardíacas realizan un rol importante para que la sangre corra a través del corazón o hacia afuera de ese órgano. Cuando dejan de funcionar adecuadamente ocurre lo que se conoce como enfermedades valvulares cardíacas, condiciones que pueden manifestarse desde el nacimiento o en pacientes con enfermedades degenerativas como los envejecientes.
¿Cuáles son algunas de estas enfermedades valvulares del corazón? ¿Qué síntomas se presentan y cuál es su tratamiento?
Estas fueron algunas de las preguntas que contestó el doctor Gilberto Rivera, quien es presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología y tiene 16 años laborando en el Hospital Auxilio Mutuo donde es director del Departamento de Cardiología No Invasiva y del Laboratorio Invasivo de Cateterismo.
Dr. Gilberto Rivera: Las enfermedades valvulares del corazón son condiciones que afectan estas estructuras que son las válvulas, que se encuentran dentro del corazón y que tienen un rol bien importante en mantener la dirección del flujo de la sangre hacia donde le corresponde. Cuando hablamos de las enfermedades valvulares, hablamos de procesos que ocurren en donde el funcionamiento de esa válvula no es normal.
DGR: Las dos condiciones principales que afectan las válvulas del corazón son:
-Estenosis o estrechez valvular, que es cuando una válvula no abre normalmente. Si una válvula no abre normalmente, eso significa que se hace más difícil el flujo de sangre a través de ella, lo que puede tener diferente tipo de repercusión dependiendo de cuál sea la válvula afectada.
-El otro proceso que suele afectar las válvulas es lo que se llama la regurgitación o insuficiencia valvular. Esta ocurre cuando la válvula, por problemas en su estructura, no cierra adecuadamente y permite el liqueo de sangre en la dirección en donde no se supone que esté ocurriendo la circulación en ese momento.
DGR: Un problema valvular puede deberse a un proceso degenerativo, pero también puede deberse a un problema congénito, o sea que la persona nació ya con un problema valvular, aunque esos son los casos más raros. Hay bebés que nacen con problemas de válvulas que no se desarrollaron y suelen requerir cirugía de recién nacidos.
De los problemas congénitos que llegan a la adultez, es más común la que se llama válvula aórtica bicúspide, que es esa válvula aórtica que el ventrículo izquierdo permite que la sangre salga a la arteria principal y en vez de esa válvula estar formada por tres semilunas de un material de tejido conectivo que abre y cierra, nace con dos semilunas. Y esa situación tiene la particularidad de que en la quinta o sexta década de la persona las válvulas suelen degenerarse de una forma bien agresiva y puede formarse tanto estenosis como regurgitación.
DGR: Usualmente los pacientes que nos llegan con problemas valvulares vienen con la queja de su médico de cabecera de que le escuchó un soplo. El soplo es un flujo turbulento de sangre a través de una estructura que no está normal y que hace que la sangre viaje en unas velocidades muy elevadas.
Es una turbulencia muy parecida a por ejemplo cuando uno está regando el patio, y uno tuerce la manguera y se forma ese sonido del agua pasando por la manguera. A ese tipo de sonido o turbulencia en el corazón se le conoce como un soplo. Los soplos no suelen ser continuos, sino en ciertas partes del ciclo del corazón. Cuando el corazón se contrae suelen haber soplos de regurgitaciones o de estenosis, dependiendo de cuál sea la válvula afectada.
Además del soplo cardíaco una persona puede quejarse de que se fatiga cuando hace su actividad física usual, puede tener dolores de pecho del tipo anginoso, presentar síncope o desmayo. También hay personas que pueden presentar retención de líquidos, que son síntomas de fallo cardiaco.
Todo lo que son síntomas de fallo cardíaco puede deberse no a que el corazón esté debilitado, sino a que hay un problema valvular importante que esté haciendo que el bombeo del corazón no sea el adecuado.
DGR: Los factores de riesgo suelen ser similares a los asociados a la enfermedad de las arterias del corazón que son: hipertensión, colesterol alto y fumar. Pacientes con diabetes son más propensos también. Hay un grupo de pacientes que tienen conducta de alto riesgo por el uso de drogas intravenosas y los pacientes que tienen catéteres como los de diálisis, también están más predispuestos a que viajen bacterias en la sangre.
Mundialmente la enfermedad reumática cardíaca también es una de las causas principales y ocurre cuando una persona sufre de un proceso infeccioso como los estreptococos que afectan comúnmente la garganta y que ocurre como parte de la respuesta inmunológica, procesos que nos causan degeneración en las válvulas del corazón.
DGR: El examen físico suele ser sugestivo en muchos de los casos. Pero la prueba que definitivamente nos va a dar el diagnóstico es el ecocardiograma, que es el sonograma cardiaco donde se va a poder ver la estructura del corazón, el movimiento de las válvulas y uno puede estudiar en detalle el flujo de la sangre dentro del corazón, identificar la dirección y velocidad de la sangre a través de las válvulas y se puede cuantificar si esa insuficiencia es leve, moderada o severa.
Otra prueba importante es la radiografía de pecho o la placa de pecho donde se puede ver el tamaño del corazón, cómo están los campos pulmonares, si hay congestión pulmonar y tener idea si el problema valvular está causando problemas más serios. El electrocardiograma nos va a ayudar a ver también otro tipo de complicaciones que pueden verse en los pacientes de enfermedad valvular.
En pacientes que ya uno tiene cierta evidencia de que hay un problema valvular importante y que deban someterse a un tipo de procedimiento de reparación realizamos el cateterismo cardiaco para evaluar el funcionamiento valvular. Estudios hemodinámicos también nos permiten cuantificar la severidad de la válvula, tomar mediciones y ser certeros en el diagnóstico.
DGR: En el pasado muchas veces lo que se realizaban eran procedimientos de valvuloplastía, se insertaban unos catéteres y se dilataban unas válvulas. Pero con el tiempo nos dimos cuenta de que estos procedimientos resolvían muy poco porque el problema estructural permanece. Los procedimientos que entonces se desarrollaron y que han sido principalmente el manejo durante muchos años ha sido la cirugía de corazón abierto, donde un cirujano tiene que abrir el pecho, llegar hasta el área de la válvula y hacer un reemplazo de la válvula, ya sea mecánica o biológica.
Recientemente se han desarrollado las técnicas de reemplazo de válvula percutánea, donde a través de un mismo procedimiento, similar al cateterismo, se han desarrollado válvulas que pueden insertarse al cuerpo a través de esas arterias principales, llegar al área donde va la válvula aórtica y a través de un sistema que es para aplicar o descargar esa válvula se coloca en su posición. Y en cuestión de segundos, el paciente tiene una válvula donde le corresponde y que debe corregir el defecto que tiene.
Inicialmente se utilizaban en las estenosis de válvula aórtica en pacientes que no eran candidatos a operarse, pero las técnicas han demostrado ser tan efectivas y de seguridad que se ha ido extendiendo la indicación a grupos de riesgo intermedio. Han salido estudios donde personas de bajo riesgo también se benefician grandemente de esto y con menores complicaciones que una cirugía de corazón abierto. Para la válvula mitral ya hay centros que están haciendo ese tipo de procedimientos donde logran entrar de forma percutánea.
A veces se hacen procedimientos híbridos donde el paciente pudiera hacerse un reemplazo valvular ya sea por catéter o por cirugía y las arterias del corazón se arreglan poniendo mallitas. Se le puede hacer una intervención y se pone un stent y la reparación valvular se hace a través de catéter y ese paciente puede recibir un tratamiento de reparación de problemas valvulares complejo completamente a través de catéteres.
DGR: Lo más importante es identificar el paciente que tiene un problema valvular que amerite una intervención, porque no todas las personas que tienen problemas valvulares necesitan una intervención. De hecho, podemos tener pacientes que tienen insuficiencia valvular severa o tienen estenosis severa y que el cuadro clínico no amerite una intervención.
DGR: Amerita intervención un paciente que tiene enfermedad valvular moderada severa con síntomas clínicos de fallo o insuficiencia cardiaca que son explicados por el problema valvular. También puede haber pacientes que aunque no tengan síntomas significativos tienen el problema valvular y cuando uno evalúa la función y el tamaño del corazón, uno ve que se ha afectado tanto el funcionamiento en la fuerza de bombeo como el tamaño del corazón se está dilatando, o sea que tiene evidencia objetiva de que ese problema valvular está causando problemas serios.
Ya ahí uno establece que el paciente es candidato a hacerse una reparación o un reemplazo. Podemos encontrar pacientes que cuando uno le hace el cateterismo tienen obstrucciones severas en las arterias del corazón. A esos pacientes uno los refiere para que se hagan una reparación quirúrgica, donde en una operación de corazón abierto se hacen bypass o puentes ortocoronarios y en el mismo procedimiento se hace la reparación o reemplazo valvular que requiera.
DGR: La enfermedad valvular severa es una enfermedad que le puede costar la vida a la persona porque un problema valvular severo lleva a fallo cardiaco. Personas con problemas infecciosos cuya válvula se destruye podrían desarrollar un problema agudo y de momento presentar un edema pulmonar agudo. El paciente que desarrolla un problema valvular agudo es un paciente que suele estar más críticamente enfermo que el paciente que desarrolla un problema valvular crónico.
Mientras, los pacientes con enfermedad valvular degenerativa presentan en su mayoría problemas crónicos desarrollando progresivamente disminución en su capacidad de realizar actividad física. Estos pacientes son más susceptibles a tener arritmias cardiacas, a padecer infartos cardiacos y pueden padecer de problemas en el resto de los sistemas del cuerpo como: problemas renales, de hígado, apoplejías o infartos cerebrales, encefalopatía o problema de funcionamiento del cerebro porque no hay flujo de sangre adecuado.
DGR: Lo que la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología está tratando de llevar a los médicos primarios es que tenemos que examinar a los pacientes. Primero, que la persona busque evaluación de su médico de cabecera y una vez que llegue al médico que este haga un examen físico adecuado, que debe incluir una auscultación con el estetoscopio para escuchar bien ese corazón, tratando de identificar si hay algún tipo de soplo o hallazgo que sugiera un problema valvular importante.
Tenemos que identificar nuestros pacientes con hipertensión también, a los diabéticos y los que tengan problemas de líquidos y tratarlos adecuadamente. Si logramos mantener a nuestra población más saludable desde más temprano en la vida, esas personas van a poder llegar a su séptima década de vida con menor incidencia de complicaciones.
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