Algunos especialistas han evidenciado en su práctica clínica, que los pacientes que padecen diabetes, están recurriendo constantemente a la revisión de la glucosa en la sangre, aun cuando el personal médico no lo recomienda.
Recurrir al análisis de la glucosa con métodos empíricos y de bajo costo, empeora de gran manera los resultados y diagnóstico de los pacientes con esta enfermedad, además genera problemas costo negativos. Ante estas premisas, se han impulsado campañas que promuevan un uso adecuado frente a los métodos con los que se realiza la prueba de la glucemia y que no son aprobados por las entidades de salud de cada país.
La primera recomendación, es evitar que el paciente se auto realice la monitorización de la glucosa, sobre todo en aquellos que padecen diabetes tipo 2, debido a que esta enfermedad posee agentes que no causan hipoglicemia.
Para dar la anterior recomendación, se realizó un análisis de 12 ensayos clínicos en los que se hacía la revisión de más de 3000 pacientes, evidenciando que no había muestras diferenciales entre los pacientes que no controlaban la glucemia varias veces al día, esto en comparación con los pacientes que monitorean su glucemia varias veces al día con el control glucémico.
De igual forma, se estableció que tampoco había efectos adversos en la calidad de vida relacionada con la salud, satisfacción del paciente o disminución del número de episodios de hipoglucemia.
La misión de esta investigación consistía en cuantificar la tasa de uso y el costo del autocontrol de los suministros de glucosa en la sangre que potencialmente se usan de manera inapropiada, específicamente centrándose en las tiras reactivas, el suministro más costoso para Monitoreo regular de glucosa.
Un estudio retrospectivo, realizado por el JAMA Internal Medicina, evidenció que muchos adultos con diabetes tipo 2 verificaban sus niveles de glucosa en la sangre en repetidas ocasiones durante el día, incluso si se estaban medicando para contrarrestar la hipoglucemia.
Para conocer los resultados del análisis anterior se recurrió al análisis de 370.000 pacientes que padecían diabetes tipo 2 y que no recibían insulina. Esta revisión suscitó que alrededor de la cuarta parte de ellos, tenían al menos tres reclamaciones de tiras reactivas de glucosa durante 1 año, más de la mitad de las cuales se consideró que posiblemente estaban usando las tiras reactivas de manera inadecuada.
Comentarios de Facebook