Recientes estudios del Journal of the American College of Cardiology afirman que saltarse los desayunos podría relacionarse con la muerte prematura debido a enfermedades cardiovasculares. Exacto, aquellas personas que no desayunan y se saltan esta importante comida del día podrían sufrir un mayor riesgo de obesidad, colesterol alto, tensión alta, diabetes tipo 2, síndrome metabólico y enfermedades cardiovasculares.
El estudio encontró que las personas que nunca desayunaban tenían un 87% mayor de mortalidad cardiovascular en comparación con aquellas que sí desayunaban de forma habitual.
Se recogieron los datos de 6550 adultos estadounidenses en el grupo etario entre 40 y 75 años de edad. Los datos fueron procesados para determinar el estado de salud de estos adultos hasta el año 2011. En total, se registraron 2.318 muertes durante un período de seguimiento promedio de 18,8 años, incluidas 619 a causa de enfermedades cardiovasculares.
Los datos obtenidos se resumirían de la siguiente manera:
Las personas que nunca desayunaban frente a los que sí lo hacían diariamente poseían un mayor riesgo de muerte por enfermedad cardíaca e ictus.
A pesar de que el estudio no incluía información sobre los alimentos o bebidas que se consumían, sí se observó que saltarse el desayuno es más dañino que perjudicial.
Lo cierto es que no es la primera vez que un estudio afirma este hecho. Recientemente, una investigación publicada en JACC determinó que desayunar poco o nada duplicaba el riesgo de lesiones ateroscleróticas independientemente de la presencia de los factores de riesgo tradicionales para la enfermedad cardiovascular. Además sugieren que saltarse el desayuno podría servir como marcador de hábitos alimenticios y de un estilo de vida poco saludables.
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